Muchas veces sentimos la necesidad de hacer algo, quizás por impulso, por desafiar las normas, por romper con la monotonía o por la falta o la demasiada adrenalina que experimentamos en ese momento. Cuando actuamos así sin más, nos olvidamos de las consecuencias de nuestros actos. Confiamos en que las personas que estuvieron en los buenos y malos momentos no tienen por qué abandonarnos. No obstante, el peor momento llega cuando te dicen: no me esperaba eso de ti o creía que sería lo último que harías. Es ahí, justo en ese instante cuando el mundo se te cae encima. Cuando eres consciente de que te has equivocado y ni siquiera te consuela pensar que cualquiera se equivoca. Sabes que es tú error y que la decepción que has creado no podrá ser olvidada con unas disculpas. Pero a su vez, la decepción es mútua porque cuando más necesitas a esa persona, cuando levantarte se convierte en una carga y agradecerías su apoyo, ya no está. Estuvo en los buenos y malos momentos pero no puedes confiar en que estará en un futuro por mucho que desees que sea así y te lo diga cuando todo es de color rosa. Las personas cambian y ahora me doy cuenta de que tú no eras una excepción.
jueves, 6 de febrero de 2014
domingo, 19 de enero de 2014
Miedo
Tengo miedo de perderte. De que ya no seas la razón por la que deseo que lleguen los fines de semana. De volver a Madrid a base de recuerdos y fotografias pero no poder sentir tu mano y la mia unidas para no perdermos entre la multitud. De tropezarme y no tenerte a mi lado para ayudarme a levantarme. De que se acaben los abrazos y los besos. De que te olvides y no quieras saber nada de mi. De que todo lo que hemos pasado juntos no lo pueda recordar contigo. Miedo a vivir mis días sin ti
jueves, 16 de enero de 2014
A veces, creo que es mejor un: si te e visto no me acuerdo. Sin embargo, no puedo hacer eso. Has sido un falso, un orgulloso, un rencoroso y has engañado todo lo que has querido y más pero aún con eso he aprendido ciertas cosas de ti. Por ejemplo, que confiar en las personas sea mucho o poco pasa factura, que no merece la pena pensar en alguien cuando para esa persona serías su último pensamiento y que en ocasiones la verdad es más creíble que la mentira. No se si fue un error conocerte porque no me arrepiento de nada. Solo se que yo no estoy dispuesta a hacer lo que has hecho tú. Prefiero quitarme la máscara del orgullo y empezar de cero que seguir diciéndonos palabras que sientan peor que un hielo por la espalda.
martes, 14 de enero de 2014
Ella solo deseaba que todo fuera como antes. Sin embargo, el poder que él tenía para hacerla sentir culpable era más fuerte que su deseo y eso hacia que todo hubiera cambiado. Ya no hablaban con tranquilidad y después de cada palabra llegaba un momento tenso sin saber qué decir pues ninguno quería acabar discutiendo. El problema, es que antes de una posible discusión tenían antes otras muchas sin resolver y el intento por fingir que no pasaba nada siempre terminaba fracasando. Las mentiras,las acusaciones y el rencor se hicieron protagonistas en sus días. Mientras, ella no perdía la esperanza y confiaba en que el tiempo diera paso a una palabra bonita por su parte en forma de disculpas. Disculpas que la devolvieran una sonrisa. Y así... aunque era fuerte en algunas ocasiones, acabo siendo consciente de que tenía una debilidad. Su debilidad era él.
viernes, 8 de noviembre de 2013
Creía que sería más fácil vivir sin ti
Contaba los días que faltaban para vernos mientras crecían las ganas de tenerte y abrazarte. Sin embargo, ahora que desgraciadamente vuelvo a vivir con tu ausencia me doy cuenta de que fue una larga espera para tan corto el momento vivido. Por una parte, me consuela saber que aproveche cada instante, cada segundo y cada minuto a tu lado al máximo. Pero a su vez me desilusiona levantar la cabeza y ver que ya no estas ahí, reconocer que formas parte de mi pasado y muy pocas veces de mi presente, que no estas para calmarme y contagiarme la mejor de las sonrisas y lo peor de todo, que falta un año para estar otra vez en tus brazos, para intercambiarnos consejos, para desahogarme y reírme a tu lado...para escuchar el más sincero
te quiero.
lunes, 28 de octubre de 2013
El comienzo de una larga noche
Una noche más de insomnio en la que reina la oscuridad, las ganas de dormir y no poder porque algunos pensamientos no dejan de merodear por la cabeza y parece que no quieren acabar el día. Lo intentas una y otra vez. Intentas que esos pensamientos abandonen tu mente, pero el resultado es inútil. Todos ellos aparecen uno detrás de otro. Lo bueno del día, lo malo, las preocupaciones, las alegrías, las tristezas...
Es imposible dejar de dar vueltas en la cama y cambiar del lado derecho al izquierdo, del izquierdo hacia arriba y de arriba hacia abajo se ha convertido en el baile de cada noche. Entonces cuando has pensado en todo lo que ocurrió durante el día de todas las maneras posibles, el agotamiento se hace de notar y los ojos empiezan a cerrarse siendo una noche más la almohada fiel compañera de los sueños que están por venir.
Es imposible dejar de dar vueltas en la cama y cambiar del lado derecho al izquierdo, del izquierdo hacia arriba y de arriba hacia abajo se ha convertido en el baile de cada noche. Entonces cuando has pensado en todo lo que ocurrió durante el día de todas las maneras posibles, el agotamiento se hace de notar y los ojos empiezan a cerrarse siendo una noche más la almohada fiel compañera de los sueños que están por venir.
miércoles, 2 de octubre de 2013
...
Ella solo deseaba que todo fuera como antes. Sin embargo, el poder que él tenía para hacerla sentir culpable era más fuerte que su deseo y eso hacía que todo hubiera cambiado. Ya no hablaban con tranquilidad ya que después de cada palabra llegaba un momento tenso sin saber qué decir pues ninguno quería acabar discutiendo. El problema, es que antes de una nueva posible discusión tenían antes otras muchas sin resolver y el intento por fingir que no pasaba nada siempre terminaba fracasando. Las mentiras, la cabezonería y las acusaciones se hicieron protagonistas en sus días. Mientras, ella no perdía la esperanza y confiaba en que el tiempo diera paso a una palabra bonita por su parte en forma de disculpas. Disculpas que la devolvieran una sonrisa. Y así...aunque era fuerte en la mayoría de las ocasiones, se acabo dando cuenta de que tenía una debilidad. Su debilidad era él.
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